Si las tuberías del baño ‘burbujean’ haz esto: no gastarás dinero en el fontanero y dirás adiós al problema

El ruido de las tuberías del baño puede resultar muy molesto y embarazoso, sobre todo en las horas más tranquilas del día o cuando hay invitados en casa; afortunadamente, existen formas baratas de remediarlo.

Para evitar ser un espectador frecuente de los ruidos procedentes del cuarto de baño, se pueden poner en práctica algunas soluciones prácticas que permitirán, incluso por propia cuenta y sin demasiados gastos, volver a disfrutar de un entorno tranquilo y, sobre todo, silencioso.

Lo primero que hay que comprobar, al mudarse a una casa nueva o al oír ruidos molestos procedentes del cuarto de baño, es el aislamiento de las tuberías. De hecho, si las tuberías están expuestas u ocultas por un material deteriorado, se pueden crear vibraciones que serán la causa de todos los ruidos molestos.

Otro motivo que puede provocar la generación de ruidos es una presión excesiva del agua. En este caso, bastará con comprobar la presión de las tuberías y, si es necesario, adquirir un reductor de presión para regularla y reducir el caudal de agua.

Si se vive en una zona de España donde el agua está especialmente llena de cal, es probable que a la larga las tuberías se obstruyan parcialmente. Para solucionar este problema se puede utilizar un potente descalcificador que se vierte directamente en el desagüe del inodoro.

Cómo reducir el ruido de las tuberías del baño

La mayor parte de las vibraciones proceden de la cisterna del inodoro, por lo que es importante realizar un mantenimiento ordinario y extraordinario constante, evitando la acumulación de residuos o polvo en el interior de la cisterna, lo que podría provocar ruidos y fallos de funcionamiento.

Para remediarlo, se puede optar por la compra de un descalcificador central o eliminar manualmente las acumulaciones de cal que se depositan en las paredes de la cisterna, el flotador y la válvula.

Qué hacer cuando esto no es suficiente

Si una vez comprobados todos estos aspectos no es posible solucionar el problema, es importante ponerse en contacto con un profesional que realice una vídeo-inspección, y podrá entender si el ruido deriva de un problema mucho mayor de lo esperado.

En este caso, de hecho, podría tratarse de un deterioro de las juntas y soportes de las tuberías o de una rotura en el propio sistema de fontanería, un hecho no demasiado infrecuente que ocurre sobre todo en casas que no han sido construidas recientemente.