Nuevas tecnologías, todo se vuelve táctil: un verdadero avance
Hemos repetido hasta la saciedad cómo las nuevas tecnologías han dado verdaderos saltos adelante, consiguiendo cosas que hace sólo unos años nos parecían ciencia ficción.
Basta pensar, por ejemplo, en la robótica, la creación de robots y prótesis que resultan muy útiles para fines médicos, así como en otros campos de aplicación similares.
En concreto, un equipo de investigadores de la Universidad de Michigan ha sido capaz de crear un auténtico complejo de sensores capaz de convertir literalmente cualquier cosa en táctil. El nombre de este invento es SAWSense, y realmente podría suponer un gran avance por los infinitos usos y aplicaciones que podría aportar con el tiempo. Pero ¿cómo funciona este sistema sensorial? Averigüémoslo juntos, entrando en cada uno de sus detalles.
SAWSense es un sistema realmente vanguardista, ya que hace uso de ondas acústicas superficiales, para poder reconocer con extrema precisión y exactitud todas las posibles entradas que pueda encontrar, como la sensación táctil o la sensación de un rasguño en la piel, que luego se envía a un ordenador, que será capaz de interpretarla y analizarla en detalle, un poco como ocurre con la sensación táctil en el cuerpo humano.
Sobre este tema habló Yasha Iravantchi, coordinador de la investigación en cuestión, que actualmente puede leerse en la famosa base de datos de artículos científicos ACM Digital Library. Iranvatchi afirmó así que, en un futuro más o menos próximo, gracias al uso y la aplicación de SAWSense, podremos hacer uso de nuestro cuerpo en forma de una superficie con la que podremos interactuar rápida y fácilmente.
Cómo funciona SAWSense
Entrando más concretamente en el mecanismo de funcionamiento de este particular sistema sensorial SAWSense, éste hace uso de la innovadora tecnología Voice Pickup Units, que sólo discrimina las ondas acústicas que están presentes en la superficie de cualquier objeto cercano.
De este modo, SAWSense es capaz de funcionar incluso en presencia de entornos ruidosos, donde hay muchas ondas sonoras que podrían confundir a cualquier otro sistema de este tipo. Gracias a un sistema de aprendizaje automático, el ordenador será capaz de reconocer cada vez con mayor especificidad cualquier tipo de entrada y señal procedente del exterior.
Esto podría dar lugar a numerosas aplicaciones, especialmente en el campo de los electrodomésticos, permitiendo así cubrir toda su superficie, haciéndola sensible al tacto. Por tanto, sólo nos queda esperar con impaciencia a ver cómo se desarrolla esta aplicación en el futuro.