La forma infalible de ganar 1.000 euros sin esfuerzo: sólo desearás haberlo pensado antes
Algunas decisiones de la vida cotidiana influyen mucho en nuestro ahorro: elegir medios de transporte alternativos permite ahorrar mucho dinero.
Entre las opciones que tienen los españoles para ahorrar significativamente está el uso de la bicicleta eléctrica, un medio de transporte especialmente popular para desplazarse por la ciudad u ir a trabajar.
Las bicicletas eléctricas se prefieren sobre todo por una cuestión de sostenibilidad: a diferencia de los coches, estos medios de transporte no contaminan.
El uso de la bicicleta eléctrica en lugar del coche habitual proporciona un ahorro definitivo: basta con hacer algunos cálculos para darse cuenta de la ventaja real para el medio ambiente y el bolsillo.
Sin duda, los más privilegiados para comprar una e-bike son los que trabajan a pocos kilómetros de casa: si se tiene que recorrer menos de 15 km, la bicicleta eléctrica resulta ser la mejor opción.
Cuánto se ahorra al mes comprando una e-bike
Los costes de combustible son la primera partida de ahorro cuando se decide comprar una bicicleta eléctrica. Los gastos mensuales de funcionamiento de este medio de transporte son significativamente inferiores a los de un coche. Un cálculo rápido muestra que se pueden ahorrar unos 70,00/ 100,00 euros al mes con una bicicleta eléctrica. Cuando se trata de una e-bike que está dentro de los límites de potencia, no es necesario homologarla y, por lo tanto, no se necesita seguro ni impuesto de circulación, lo que supone un ahorro adicional.
Con una e-bike también se ahorran gastos de aparcamiento, que siempre son difíciles de encontrar cuando se tiene un coche. A menudo, al coste del aparcamiento temporal hay que añadir también el del alquiler de una plaza de aparcamiento o garaje, un coste que, obviamente, se eliminaría con la compra de una bicicleta eléctrica.
Por qué una bici eléctrica es más barata que un coche
En caso de avería, el ahorro con respecto al coche está absolutamente garantizado, ya que las piezas de recambio de la bicicleta cuestan mucho menos que las de otros medios de transporte. Si pensamos en lo esencial que puede ser un medio de transporte para la familia, resulta importante aprender a ahorrar dinero al utilizarlo.
El objetivo de comprar una e-bike es evitar la compra de un segundo coche familiar, lo que podría tener un impacto significativo en los gastos diarios. En definitiva, la elección de una e-bike para desplazarse por la ciudad en distancias cortas o para ir a trabajar todos los días es ganadora, con un ahorro global de unos 1.000 euros al año.