Al gastar unos 20 euros podrás ahorrar cientos: el increíble truco en el que nadie había pensado
Ante las elevadas facturas de los servicios públicos, que han puesto a las familias españolas en una situación difícil, es cada vez más importante saber cómo ahorrar dinero y reducir el consumo doméstico.
Al adoptar un comportamiento adecuado y unos hábitos cotidianos saludables, se puede ahorrar considerablemente en la factura de la luz. Averigüemos cómo ahorrar electricidad en el hogar y conseguir así una perspectiva cada vez más sostenible.
En primer lugar, habría que intentar reducir el consumo de los aparatos en stand-by. De hecho, los electrodomésticos, aunque estén apagados, siguen consumiendo electricidad si no se desenchufan. Cuando no se utilicen, habría que desenchufar los televisores, los hornos microondas y las distintas fuentes de alimentación de los ordenadores y otros aparatos electrónicos.
A la hora de elegir los electrodomésticos para el hogar, siempre habría que optar para los de última generación y alta eficiencia energética, que garantizan una reducción del consumo de hasta el 45% en comparación con el suministro eléctrico habitual. Se trata de una inversión inicial que luego se amortiza con el tiempo.
También habría que comprobar siempre el tipo de contrato de nuestra compañía eléctrica: en el caso en que se tenga una tarifa eléctrica bivariante, habría que prestar siempre atención a las franjas horarias y los días de la semana en los que consumimos menos, concentrando el lavado en la lavadora y el lavavajillas precisamente en esos días.
Cómo utilizar los electrodomésticos para reducir el consumo de energía
Entre los electrodomésticos que consumen más energía están las lavadoras y los lavavajillas: para reducir el consumo hay que ponerlos en marcha siempre con la carga llena y a baja temperatura, prefiriendo los programas Eco o de ahorro energético y utilizando la función de inicio diferido para iniciar los ciclos de lavado en los momentos en que más se ahorra. El frigorífico y el congelador deben mantenerse siempre en funcionamiento para evitar daños en los alimentos: en este caso, para reducir el consumo, no hay que abrir el frigorífico con demasiada frecuencia y se deben colocar estos aparatos lejos de fuentes de calor y paredes, programándolos a temperaturas intermedias y descongelándolos periódicamente.
Por lo que se refiere al horno eléctrico y el microondas, en cambio, deben tenerse en cuenta algunos buenos hábitos: el horno eléctrico debería apagarse poco antes de que finalice el tiempo de cocción de los alimentos para asegurar que se aprovecha el calor acumulado y no la energía eléctrica para producir más; el microondas, en cambio, nunca debería dejarse en stand-by, ya que es uno de los aparatos que más consume durante esta fase.
Bombillas LED: la mejor opción para ahorrar cientos de euros al año
¿Una forma sencilla y práctica de ahorrar cientos de euros al año en la factura de la luz gastando muy poco? ¡Elegir bombillas LED! Las bombillas fluorescentes de alta eficiencia cuestan un poco más que las bombillas normales, sin embargo son una inversión práctica a largo plazo: con un desembolso de 15 a 50 euros para todas las bombillas de su casa, se tiene garantizado un ahorro de varios cientos de euros al año.
Además de garantizar un menor consumo eléctrico, y por tanto un ahorro seguro en la factura de la luz, duran más y por tanto hay que sustituirlas menos a menudo con el paso de los años, y también garantizan una reducción probada de la fatiga ocular gracias a la forma en que iluminan las estancias.