El agua es, sin duda, el enemigo número uno de nuestro móvil. Por lo tanto, puede ser útil saber qué hacer en caso de que se moje.
Puede ocurrir que nuestro dispositivo móvil, por un motivo u otro, caiga al agua y se moje. Por cierto, son objetos que tenemos constantemente en nuestras manos y una distracción o un movimiento brusco podrían ser fatales para nuestro dispositivo.
Si esto ocurriera, que no entremos en pánico ni reaccionemos con desesperación, porque aún podríamos tener alguna posibilidad de recuperarlo.
Un dispositivo mojado emite varias señales que podrían anunciar su fin, por ejemplo, puede que la batería deje de cargarse, que la pantalla se quede en negro o, en el peor de los casos, que el dispositivo ya no se encienda.
En cualquier caso, puede ser reconfortante saber que el porcentaje de que el dispositivo caiga al agua y nos abandone para siempre es sólo del 11%. Por lo tanto, respiremos aliviados, esperemos tener un poco de suerte y veamos qué hacer paso a paso cuando nuestro móvil o smartphone cae al agua.
El móvil se ha convertido en una herramienta prácticamente indispensable y omnipresente en nuestros días. Por ello, puede ocurrir que en un momento de distracción caiga al agua y se moje. Entonces, ¿qué hacer si esto ocurriera?
Evidentemente, lo primero es sacar el dispositivo del agua lo antes posible, apagarlo y evitar volver a encenderlo inmediatamente. Otra precaución útil de seguir en caso de que el móvil se moje es no intentar secarlo con un secador de pelo, ya que podría provocar un sobrecalentamiento del dispositivo, comprometiendo el microchip u otras partes internas. A lo mejor hay que colocar el teléfono móvil en posición vertical y extraer con cuidado la tarjeta SD y la SIM, seguidas de la batería cuando sea posible. Una vez secas todas las partes del dispositivo, puede ser una buena solución colocarlo en un cuenco de arroz y dejarlo sumergido durante un par de días. De hecho, el arroz puede ser de gran ayuda para absorber la humedad que se ha quedado en el interior del dispositivo.
Tras un par de días sumergido en arroz, el móvil puede volver a montarse, ponerse a cargar y encenderse. ¿Funciona? Entonces es muy probable que el móvil esté a salvo. En cualquier caso, conviene tener en cuenta el dicho «más vale prevenir que curar», por lo que se recomienda encarecidamente dotarse de una buena funda protectora impermeable.
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